🍂 Cuenta atrás para el otoño — ¡Faltan 3 semanas!

Adiós agosto, septiembre ya llama a la puerta

Último viernes de agosto. Parece mentira, pero aquí estamos, con el verano casi despidiéndose y el otoño acercándose sin hacer ruido. Solo quedan tres semanas y, aunque el calor aún aprieta, ya hay señales de cambio: las tardes se acortan, las sombras se alargan, alguna tormenta refresca y la luz tiene un tono más suave. Agosto se va poco a poco, y yo no quiero dejar que pase sin guardar sus últimos momentos.

Agosto en pocas pinceladas

Este mes siempre pasa volando. Han sido días intensos, de calor, de pequeñas escapadas y de esos momentos que se quedan guardados. Aún tengo en la retina el hotelito rodeado de almendros y olivos en Sierra Nevada, las cenas fresquitas junto al río en Pinos Genil, la luna llena del esturión, las compras con mi hija en busca de algún detalle otoñal… y ahora, esta última salida cerca de los Pirineos: prados verdes en Coll d’Ares, moras silvestres en la mano, manzanas pequeñas escondidas entre los árboles y ese aire que ya huele distinto.


Son solo guiños, pero me hacen pensar en lo que viene: compotas, mermeladas, frascos llenos en la despensa. No es que las haga cada semana, pero me encanta la idea de “guardar” un trozo de verano para abrirlo más adelante. Y entre paseo y paseo, algún capricho: una vela nueva, un detalle para la casa, algo que ya me haga sentir que el otoño está a la vuelta de la esquina.


Aquí puedes seguir toda la cuenta atrás →un paseo suave entre palabras, imágenes y estaciones

Agosto que se apaga y septiembre que asoma

Lo bonito de agosto es que, sin darnos cuenta, nos prepara para lo que viene. Es como si el verano empezara a bajar el volumen: seguimos buscando el sol, pero ya no a cualquier hora; nos apetece más la sombra de un árbol, una terraza tranquila o incluso una tormenta que refresca. A mí me encanta ese momento en que el cielo se pone gris y el aire huele a tierra mojada. Hasta una bebida caliente, que hace un mes habría parecido una locura, ahora tiene su encanto.

Y es que septiembre siempre me ha parecido un pequeño “año nuevo”. Se acaban las vacaciones y, casi sin querer, volvemos a las rutinas: el despertador vuelve a sonar, las calles se llenan de movimiento, los niños empiezan el cole y nosotros desempolvamos agendas, listas y planes. A mí me gusta mucho esa sensación de volver a empezar, de volver a poner orden. Esta semana ya tengo mi agenda lista, con sus páginas limpias, esperando garabatos, notas y mil ideas (sí, soy de las que disfruta estrenando una agenda como quien abre un libro nuevo).

También llegan las pequeñas metas: organizar la despensa, retomar proyectos que quedaron en pausa, preparar recetas más tranquilas, incluso pensar en cosas que durante el verano ni miramos, como el cambio de armario o las primeras mantas ligeras. Y aunque aún hace calor, empiezo a notar esos detalles: en las tiendas, los escaparates cambian de color, aparecen tazas más grandes para los primeros cafés largos, manteles en tonos tierra, platos que invitan a cocinar despacio y velas que huelen a especias o a madera.

Son solo pistas, pero para mí son señales de que algo se mueve. Como si todo nos empujara a ir más despacio, a volver a mirar nuestra casa, a hacer balance. Y eso me gusta: es cerrar un capítulo y abrir otro, con calma, sin prisas, saboreando cada paso.

🧡 Mi propuesta

Quedan solo unos días para despedir agosto y creo que la mejor forma de hacerlo es disfrutando de lo simple. Sal a pasear sin prisa, haz fotos de lo que te llame la atención, prueba una fruta de temporada, guarda un recuerdo (una nota, una hoja, una foto). Si refresca, enciende una vela o prepara algo especial para merendar. Y si te apetece, empieza ya a planificar algún pequeño cambio para septiembre. No son grandes gestos, son esos detalles que hacen la transición más bonita.

Nos leemos la semana que viene 🍁 septiembre ya estará aquí y la cuenta atrás seguirá. 

El otoño cada vez suena más cerca, y a mí me encanta que me pille mirando.


Gracias por estar al otro lado. Si te apetece, déjame un comentario ...

Me encantará leerte.

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